martes, 25 de junio de 2013

Un poema de Igloo


PARACAIDISTA
 
 

Entre ambos, fisuras reconocibles

del sobrepeso. Poesía anfibia

para el apuntador que procura desmontarme.

 

Arriba,

la mineralogía asiente

geométricamente colocada en la alfombra

como cubículo de dados:

nos da seguridad tomar impulso,

dóciles al perdón del sentimiento.

 

Mi poda es un repliegue,

un perfil sin legañas.

 

Y aquí es donde se dilata la autenticidad.

 

Para ponerle voz mitológica al desfile

de figuras, emborrono

mi parodia

y desdeño la parábola de la afición

que cubre la llanura con la imagen del retorno.

 

Mi predisposición es la del nómada:

no comparo el árbol con la tilde terrenal.

martes, 11 de junio de 2013

POÉTICA. Un inédito


EXCESO DE EQUIPAJE

Imagina que lo que escribes es / blanco, casi tan blanco / como lo que no escribes.